(Datos DIB)Según información de la Policía Vial bonaerense, son siete rutas nacionales donde la niebla es un peligro permanentes para los conductores: el Camino del Buen Ayre (conurbano norte) en toda su extensión; la ruta 5, entre Chivilcoy y Mercedes, y entre San Nicolás, San Pedro, Ramallo, Baradero y Exaltación de la Cruz (entre Zárate y Campana); ruta 7, entre Carmen de Areco y San Andrés de Giles; la Autopista La Plata-Buenos Aires, entre el peaje Hudson y la bajada a la capital bonaerense; la ruta 11 en el tramo General Lavalle-Vieytes (Magdalena); la ruta 3 entre Cañuelas y Las Flores; y la Autopista del Oeste, entre Luján y Moreno.
Según dijo el comisionado Eduardo Genaro, de la Dirección General de Policía Vial bonaerense, los bancos de niebla son más intensos entre abril y agosto debido a las condiciones climáticas, y peor aún si la zona está ubicada cerca de ríos o lagunas: no hay niebla más peligrosa que la que combina estos dos factores.
En cuanto a rutas provinciales, la autovía 2 entre las localidades de Maipú, Vivoratá, Coronel Vidal y Dolores tiene zonas de niebla. También la ruta 6 en toda su extensión; la 51, entre Ramallo, Arrecifes, Carmen de Areco y Chivilcoy; la 31, entre Salto, Rojas y Areco; la 30, en el tramo que une Las Flores y Tandil; y la 41 entre Baradero, Lobos, Monte y Areco.
Pese a todo, los especialistas sostienen que transitar entre la niebla no debería ser un problema. Y agregan que sólo el 5 por ciento de los accidentes se producen por factores externos (infraestructura y clima); en el 90 por ciento de los casos, la causa está en las fallas humanas.
Ante niebla, lo ideal es tomar otro camino o detenerse en un lugar seguro hasta que la ruta se despeje, pero a veces esto no es posible.
Según Gustavo Brambati, jefe de seguridad del Centro de Experimentación y Seguridad Vial (Cesvi), disminuir la velocidad antes de ingresar a una zona de niebla es el primer paso de prevención, no sólo porque brinda un margen de espacio-tiempo para frenar en caso de peligro, sino porque permite que otros vehículos que entran en el mismo sector puedan verlo. «Lo más importante es ver y ser vistos» resume.
Al entrar en un banco el conductor no puede seguir viajando de la misma manera porque el cambio de entorno altera sus sentidos. «Esta es una de las razones por la que estos accidentes se generan en los primeros minutos de haber ingresado a una zona de niebla» dice Brambati.
En estas circunstancias, la distancia recomendada entre dos autos es de al menos 5 segundos (unos 85 metros circulando a 60 kilómetros por hora).
Además, deben utilizarse luces bajas y de posición, nunca altas porque pueden encandilar y acortar el campo visual.
Desde enero mil muertos en la Provincia
Un informe revela que en lo que va del año, más de 1.000 personas fallecieron en el territorio bonaerense en accidentes de tránsito. La cifra representa el 40% del total de muertes en el país por este tipó de siniestros. En total, en los cuatro primeros meses del año, 1.023 personas perdieron la vida por accidentes en rutas y caminos, en todo el territorio bonaerense.
Según «Luchemos por la vida», la asociación que realizó el informe, el promedio mensual de muertes en accidentes de tránsito en todo el país trepa a 623: 21 muertes por día.
Después de la provincia de Buenos Aires (la más poblada del país, con más de 14 millones de habitantes), los territorios con mayor cantidad de fallecimientos por siniestros en rutas y caminos son Santa Fe (215), Córdoba (187) y Mendoza (128).
Ruta 8
En Colón se perdieron más de setenta vidas
En los últimos 15 años en los dos sectores de ruta más peligrosos que cruzan la ciudad costaron más de setenta vidas.
Los conductores que transitan la Ruta 8 por nuestra jurisdicción se encuentran con dos lugares de máxima peligrosidad. En estos sectores se produjo el mayor número de muertos y heridos.
El primero es del paraje denominado del “Bajo Morgan” y que se extiende por más de 10 kilómetros.
En esa zona la confluencia de trayectos bajos y árboles que están “pegados” a la cinta asfáltica convierten la Ruta 8
en una trampa mortal. En los últimos 15 años fueron más de 40 las personas que perdieron la vida en ese sector.
Los días de niebla el conductor recorre sectores menos densos a más densos en niebla con el cambio en la velocidad y con el peligro que en gran parte del trayecto con un mínimo “toque” con otro vehículo o frenada brusca lo dejará seguramente de cara contra un árbol.
Los días de lluvia además los desniveles que existen en el pavimento hacen que halla acumulación de agua. El auto que ingresa a esos sectores muy rápido y por el denominado efecto “patito” se encuentra rápidamente desestabilizado y sacado de la ruta hacia los “mortales hileras de árboles”.
Del lago a la caminera
El otro trayecto peligroso de la Ruta 8 por la acumulación de niebla es el que corre paralelo al lago municipal “Wilmar Cúneo” y que llega a la provincia de Santa Fe, pasando la Subcomisaria Vial.
En este trayecto y a unos 200 metros de la Caminera se encuentra un sector donde debido a que paran autos y camiones, la cinta asfáltica se “contamina” con aceite.
Los días de lluvia o cuando se humedece la cinta asfáltica, una “frenada” es la puerta de un accidente de proporciones. En ese sector fue donde chocaron en cadena cinco camiones, y se ocasionaron “grandes accidentes” con ómnibus y vehículos particulares, costando decenas de vidas.
| 
