(DIB) Los Consejos Escolares de la provincia de Buenos Aires se quejan por que no les alcanza el dinero para dar de comer en forma correcta a los alumnos que asisten a los Comedores Escolares.
En Colón desayunan, almuerzan y meriendan cerca de 800 chicos, según la nómina presentada. Los Comedores son descentralizados. En este sentido, los menú son preparados en la Escuela 1,2,3,4 6, 14 y los Jardines 901,902 –entre otros-
En la provincia hay 6.700 comedores bajo el programa de Servicio Alimenticio Escolar (SAE) del ministerio de Desarrollo Humano, Ente encargado de suministrar los fondos para la compra de alimentos, diseñar un menú equilibrado y supervisar el funcionamiento del servicio.
Los representantes escolares piden al Ministerio de Desarrollo Humano un aumento que alcance a $ 1.70 por cada alumno que asiste a los comedores. En la actualidad se recibe $ 1.20 por cada asistente.
El gobierno bonaerense sugiere una dieta en la que las milanesas se repitan más que los tallarines, el peso diario que asignan por alumno hace imposible cumplir con el menú ideal. La situación se repite sistemáticamente en cada municipio de la provincia, al igual que la incertidumbre en los Consejos Escolares, encargados de suministrar los alimentos a los distintos comedores.
Ana Jaunarena, Secretaria Técnica del Consejo Escolar de Pergamino, manifestó la misma preocupación y aseguró que para cumplir con el menú diseñado por el Ministerio necesitan el doble del dinero que les envían. “Lo que hacemos es adaptar la dieta a lo que tenemos tratando de no bajar demasiado la calidad, pero es imposible darles carne tres veces por semana como exigen” explicó Jaunarena.
En algunos distritos hubo ampliación de nominalidad
Por su parte el tesorero del Consejo Escolar de Junín, Renato Figgini Bava, señaló que en el distrito “los valores nominales de los servicios siguen estancados, igual que a principios del 2004, la plata que envía la Provincia no alcanza y aunque tratamos de hacer lo mejor, no llegamos”.
Bava aseguró que se necesita como mínimo un aumento del 30 por ciento en las asignaciones por alumno para el programa de comedores, lo cual equivaldría a $1,30 por chico. Según explicó, el incremento de los alimentos de la canasta básica hace imposible mantener la calidad del servicio.
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