En la computadora del arquitecto Carlos Reybet se encuentra el plan para solucionar uno de los problemas más graves que sufre la población de Colón y es la falta de funcionamiento de la planta depuradora.
El concejal del radicalismo argumenta «con Oscar Sutich hace dos años que comenzamos a estudiar la problemática. En los últimos meses viajamos a La Plata y estamos en contacto con especialistas en el tema. La situación es grave.
Te puedo decir sin equivocarme que solamente el 30 por ciento de los desechos cloacales de la ciudad pasan por la planta depuradora, pero a los líquidos no se le realiza ningún tratamiento, solamente a la salida se le pone cloro y eso va directamente al canal, el otro 70 por ciento pasa directamente por una especie de by-pas» Agrega «la desidia que hubo en los últimos años fue muy grande.
En el lugar existe un laboratorio donde se donaron los instrumentos, y ahora solo hay expedientes y papeles. Por otro lado, en el interior del predio debería haber 800 metros de pavimento y una vivienda de 90 metros cuadrados tal cual estipulaba la licitación. Solo se debe visitar para saber en que quedo lo referido en los papeles».
La inauguración
El 19 de mayo de l975, se licitó la planta depuradora de Colón. El costo total de la misma fue en valores constantes, fue muy cara. Diríamos extremadamente cara y además inadecuada, alcanzó a 2.515.200 dólares. Una cifra muy onerosa para aquella época. Solo basta recordar que el valor de la hectárea de campo era muy inferior a los 700 dólares.
La planta en su totalidad se construyó en 1976 y se inauguró en l978. Por aquellos años la dictadura imponía la «mordaza» y era muy poco (nada) lo que se podía informar o investigar sobre la obra pública.
La planta depuradora estaba diseñada para una población de 12.500 habitantes.
Los datos se encuentran en la información oficial de la provincia de Buenos Aires y su duración estipulada era de 15 a 20 años. En los pliegos se indica la construcción de una casa de 90 metros cuadrados y 800 metros de pavimento interno, la cinta asfáltica y la vereda hoy casi no existen.
La gravedad de la situación es elocuente. La planta caducó en 1998 y cuando fue realizada la ciudad tenía una población de 17 mil habitantes, 5 mil más de lo máximo estipulado para su normal funcionamiento.
El diagnostico
«El radicalismo está trabajando –dice Reybet- porque sabemos que la situación es grave y debemos tener un diagnostico exacto para lograr una solución. Les doy un ejemplo que realmente nos preocupa. Los días de lluvia se debe abrir el sistema porque si no se inunda la depuradora.
En las veredas existen restos de desechos humanos porque cuando se viene el aluvión se inunda» agrega « en la actualidad no funciona el barredor, ni el percolado, y en los piletones de decantación existe una hermosa plantación de zapallitos.
Debemos aclarar que para hacer una planta nueva se necesitan 19 millones de pesos, pero esto no es todo el problema. El sistema de cloacas está en alerta rojo. Como arquitecto se que existen tramos donde no hay cañerías y esto es muy peligroso, además vemos que aparece mucho barro y los faltantes de tramo serían los causantes.
También estamos sospechando que la colectora de la calle 9, realizada en el gobierno de Miguel Lavatelli, esta asentada sobre napas de agua, y por fallas en la construcción estaría mandando por la cañería agua de las vertientes».
La solución
El arquitecto Reybet, nos indica «en los últimos años siempre se dijo en dos o tres ocasiones que hubo arreglos totales, pero seguramente fueron parciales.
La planta depuradora para ser arreglada definitivamente debe ser parada durante cinco o seis meses. Lo que nosotros estamos viendo es primero ver las prioridades de arreglo que tiene el sistema y luego comenzar los arreglos graduales dirigidos por una oficina técnica, nuestra tarea va a ser titánica, pero sabemos como hacerlo y vamos a poner los mejores técnicos del partido»
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