Según se conoció todo comenzó el sábado, cuando Patricio Lucero a bordo de un auto VW Polo, asignado a la remiseria ubicada en calle 48 entre 10 y 11, procedió a dejar a dos pasajeros en calle 23 entre 53 y 54.
El trabajador avanzó y no se dio cuenta que al doblar e ingresar en calle 54, colocaba su auto en contramano. La mala suerte estuvo de su parte. Sobre calle 54 entre 23 y 24, se encontraban varios inspectores de tránsito. Los municipales luego de labrar el acta de infracción secuestraron el automóvil que el propio Lucero condujo hasta el corralón municipal, donde quedó depositado en custodia.
El domingo y notificado del procedimiento, el Dr. Carlos Rossi abrió el Juzgado de Faltas y dialogó con el afectado, dando la orden de entregar inmediatamente el vehículo a su propietario.
El fallo dice en su parte más relevante: “Privado ilegítimamente de disponer de un bien de Capital, una herramienta de trabajo, como es el automóvil retenido, de acuerdo a su actividad como remise, sin que este justificado legalmente tal hecho, pudiendo los agentes intervinientes haber incurrido en vías de hecho administrativo”.
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