El fútbol es un deporte pasional, es el mas visto y jugado en el mundo. Con tanta pasión se vive que despierta curiosidades, discusiones entre otras cosas. En este caso Colón Doce dialogó con Ariel Cuffaro Russo, ex defensor y entrenador para que brinde su opinión sobre el mundo que rodea al balón.
Con tono pausado rememora sus comienzos explicando que “tuve la suerte de poder jugar en Primera División muchos años. Era mi sueño como creo que lo es de cualquier chico, por suerte lo cumplí”. El ex defensor de Rosario Central, Los Andes, Argentinos Juniors, Belgra- no, Gimnasia de Jujuy y Millonarios de Colombia, asegura que si no hubiese sido futbolista “en ese tiempo tenía un taller gráfico, así que con seguridad me dedicaba a eso”.
El fútbol actual
El actual director técnico y ex jugador de fútbol, dirigió a Olmedo de Ecuador, Rosario Central e Instituto de Córdoba y fue ayudante de campo de Don Angel Tulio Zof. Sobre el fútbol actual señaló “como espectáculo no es lo que uno pretende y lo que le gusta. Son pocos los partidos buenos, digamos bien jugados. Hoy prevalece mucho la condición física, antes con la parte técnica los jugadores les sacaban cierta ventaja a los que corrían pero ahora se presiona mucho y hay que resolver la jugada muy rápido. Eso hace que los partidos se jueguen en espacios reducidos permanentemente, donde si un jugador para la pelota ya hay tres que lo están rodeando.
En el último mundial vimos muchos goles de pelota parada, que es lo que está sucediendo e estos momentos en Argentina. Hay que tener en cuenta muchas cosas, vos podes armar un equipo ofensivo, que juegue bien pero el rival quizás te gané el partido desde un saque lateral porque te manda los centrales a cabecear. Por lo tanto hay que tener equilibrio”.
Presiones sobre los técnicos
Todos saben que en el fútbol los resultados mandan y si un técnico no los consigue debe dar un paso al costado. Cuffaro manifiesta que “la presión es una realidad que sufre el técnico. Es complicado la carrera de entrenador ya que son pocos los tipos que tienen espaldas para mancarse cosas que son difíciles. Uno en la vida tiene un orden de prioridades y la familia en mi caso esta primero.
Yo he visto técnicos que se han separado por esta profesión. Hoy en día no se puede trabajar con total tranquilidad por las exigencias de los resultados. Uno arma el objetivo y sabe que para ganar partidos debe jugar bien el equipo, debe contar con tiempo de trabajo y ensamblar las piezas. Pero al tercer partido que no ganas sos “boleta” y están buscando otro técnico”.
Mucho se dice que el fútbol se va modernizando en todos los aspectos. Al ser consultado sobre cuál fue la última revolución táctica asevera que “no existen revoluciones tácticas. Estoy cansado de las mentiras que se dicen. Resulta que el que gana sale diciendo que lo hizo porque inventó tal cosa, todos van detrás de eso y no es así. En el fútbol vale todos los sistemas, tácticas y estrategias.
Todo lo que esté al alcance de uno vale, pero al margen de todo lo que te mencioné lo fundamental es contar con buenos jugadores ya que ellos están por encima de cualquier sistema. Se pueden ganar torneos jugando con tres, cuatro o cinco defensores, eso pasa por el gusto de cada entrenador. En el caso mío defiendo la esencia del fútbol que es el potrero donde nació el mismo, es un poco el orgullo nuestro. De ahí salieron los mejores jugadores”.
Máxima alegría Después de River-Boca el clásico más importante del país es Rosario Central-Newell´s. La ciudad está dividida con esos dos conjuntos. En la calles se respira fútbol como en ningún otro lado. En la Copa Sudamericana 05´ se enfrentaban y uno de los dos quedaba en el camino y el otro pasaría a la historia por haberlo dejado afuera a su archirival.
Ganó Central y su técnico era Cuffaro Russo que asegura que “los hinchas me hicieron sentir cuanto valía ese clásico ya que antes de comenzar el torneo local me pidieron que solo gané el partido por la Copa. Era el del honor, por suerte ganamos y hoy después de haber pasado un año no pasa un día que un hincha en la calle me recuerde ese partido, por eso le doy toda la importancia a ese momento. Tuve otros buenos momentos en Gimnasia de Jujuy cuando nos salvamos del descenso, donde tuvimos una serie de diez partidos sin perder que era inusual pero la máxima alegría fue dejar a Newell´s en el camino”.
Cuenta pendiente
Los dirigentes pagan premios por partidos ganados y no por bien jugados. Quizás eso sea contraproducente para el espectáculo. Cuffaro opina que “el objetivo final es el resultado. De todos modos es lógico lo que hacen los dirigentes, aunque a mi me importa mucho la forma con la que se consigue el resultado. Es obvio que todos quieren ganar pero yo no armaría un equipo que tenga dos delanteros grandotes y que todos jueguen para tirarle pelotazos, eso no lo haría nunca”.
Quedan muchos temas por preguntar pero es bueno saber si le queda alguna cuenta pendiente en el fútbol. Hace silencio por un instante y manifiesta que “la verdad es que en la vida el único objetivo que me puse fue en el fútbol era el de jugar en Primera División. Lo pude hacer en el club del cual soy hincha como Rosario Central y además pude ser capitán. También integré el plantel que ascendió en el año 1985 y que salió campeón de Primera al año siguiente, hecho único en el fútbol argentino. Pero todavía no tuve la suerte de hacerlo como técnico por lo que eso también es un objetivo a conseguir”
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