Además, advierten que en el verano, con esta situación y la mayor demanda de energía, podría haber problemas en el suministro.
Tarifas congeladas desde 2001, déficit creciente año tras año y energía limitada. Así es el panorama de la mayoría de las 207 cooperativas eléctricas de la provincia de Buenos Aires, que bajo un presente y un futuro sombrío, buscan subsistir, en medio de los reclamos al Gobierno y de algunas quejas de los ciudadanos.
De acuerdo al documento elevado en la última reunión de la Asociación de Prestadores Eléctricos de la Provincia de Buenos Aires (Apeba), las cooperativas necesitan con suma urgencia una solución con respecto a las tarifas, que según los números actuales, están atrasadas en un 30 por ciento.
Los prestadores de servicio pretenden una reunión entre el gobernador Felipe Solá y la Mesa de Federaciones, que está integrada por representantes de Apeba y otras cuatro entidades: Face, Fedecoba, Fice y Creces.
Y si se cumple la promesa oficial, el encuentro será la próxima semana en Pergamino.
En algunas cooperativas por cada pesos que se paga por el servicio eléctrico, el 55 por ciento se destina al costo de personal, el 44 a energía, y solo el 1 por ciento para invertir en infraestructura Justamente por eso es que las cooperativas han ido apostando a otros servicios, como es el del asfalto, salud, sepelios y seguros.
Enero peligroso
Un dato que preocupa a las cooperativas es la creciente demanda de energía que se viene dando en los últimos años.
En la región del noroeste provincial, el incremento en 2006 ronda el 7 por ciento, lo que se transformó en un llamado de alerta.
Esta escasez energética sumado al incremento lógico que se dará en los próximos meses, hace predecir a los integrantes de Apeba que este verano existirán cortes en distintas ciudades
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