La localidad de San Eduardo, distante 85 kilómetros de la localidad santafesina de Hughes tuvo como protagonista un drama familiar que dejó el saldo de una persona muerta. Un padre mató a su hijo de una puñalada luego de una discusión.
El filicidio ocurrió en la tarde del sábado y la víctima fue identificada como Roberto Durán de 30 años de edad. Todo habría comenzado luego del almuerzo cuando padre e hijo se trenzaron en una violenta discusión por motivos que serían un creciente celo entre la víctima y un hermano que se encontraba ausente.
En horas de la mañana padre e hijo fueron observados en San Eduardo, comprando mercadería en un almacén y una vez que regresaron a la zona rural la pelea se habría precipitado. El almuerzo habría sido regado con abundante alcohol y este actúo como propulsor de las pasiones que se iban a desatar poco después.
Fuerte discusión
Con el correr de los minutos la discusión subió de tono, hasta que el hijo en un rapto de furia echó de la casa a su progenitor a empellones. El padre luego de un tiempo volvió a la vivienda y extrajo una arma blanca con el cual y luego de algunas fintas aplicó a su hijo una puñalada en el pecho.
La escena habría sido presenciada por la nuera de el atacante que llamó a un médico, pero la hoja del cuchillo había afectado una arteria, muriendo el joven desangrado, sin que nada se puede hacer.
El filicida fue detenido por la policía de San Eduardo y se encuentra a disposición de la Justicia. El cuerpo de la víctima fue trasladado a la Morgue Judicial de Venado Tuerto, donde se le realizaron las prácticas de rigor.
Un trascendido de última hora dejó entrever que las pericias realizadas tanto sobre el cadáver como en la sangre del victimario, arrojaron importantes cantidades de alcohol
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