En Colón en promedio llovió 80 milímetros dándole un respiro a los productores agropecuarios.
El agua nunca llegó tan justo para las 7000hectáreas de maíz sembradas, las 15 000 de trigo y las 60000 de soja (se sembró el 10 %).
Las precipitaciones registradas el lunes favorecieron el estado de los suelos, que se encontraban compactados, y las bajas temperaturas que se esperan para el resto de la semana beneficiarán la humedad necesaria para que, tanto el trigo como el maíz implantado continúen con su evolución.
Gustavo Ferraris, quien se desempeña en el área de Desarrollo Rural de la EEA Pergamino del Inta, consideró que la lluvia del lunes «vino bastante bien» para mejorar la condición hídrica del suelo y teniendo en cuenta el pronóstico para los próximos días que anuncia bajas temperaturas, este factor incidiría «muy bien para terminar de cuajar los granos y comenzar el llenado con temperaturas bajas y buena disponibilidad de agua en el suelo.
Esta lluvia fue justa, llegó en el momento adecuado porque ya se empezaban a comprometer los rendimientos. En general, los trigos están en buenas condiciones y esta lluvia va a asegurar buenos rendimientos», sostuvo.
El ingeniero agrónomo explicó que aunque el trigo es un cultivo muy tolerante a la sequía, «se habían comenzado a ver algunos problemas como plagas. Se observaron pulgones sobre la espiga, trips y hasta algún síntoma de hoja amarillenta por falta de humedad, lo que comprometía el rendimiento. No obstante, va a ser difícil repetir los rindes del año pasado ya que existen algunas dificultades de frío y aborto de granos en los trigos de primera siembra
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