Los ladrones hacen inteligencia previa sobre los comercios y viviendas.
Eligen horarios donde existe un menor número de frecuencia de patrullaje.
En la calle la gente común, circula caminando, o en algún tipo de vehículo. Algunas personas miran las vidrieras o trata de llegar rápido a la escuela para buscar a su hijo. Otras simplemente se detiene a comprar los alimentos que utilizará en el almuerzo. El movimiento puede resultar engañoso.
Entre el ir o venir de las personas honestas, se esconden los delincuentes que van a aprovechar un descuido para apoderarse de elementos valiosos. En los últimas semanas hubo dos hechos denunciados que nos llamaron la atención: los hurtos de caja registradora en carnicería de calle 16 entre 50 y 51 y de una vitrina con artículos criollos de una veterinaria de calle 46 y 19.
En ambos casos el ladrón estuvo vigilando y actuó sobre el descuido de los propietarios. Estos hechos se unirían a otros no denunciados como hurto de bicicletas, ciclomotores, prendas de vestir, billeteras de mujer o algún electrodomésticos.
Es una nueva modalidad delictiva que por lo menos debe tener una pareja de adeptos: son los nuevos “arrebatadores”.
La actuación
Los cacos actúan a la luz del día preferentemente en horas de la mañana y en la zona céntrica.
La pareja elige a la víctima y espera el momento oportuno para llevar adelante el golpe. Los blancos elegios son los comercios que atiende solamente el propietario o amas de casas ( por lo general mayores) que dejan las puertas o ventanas abiertas mientras realizan la limpieza de la vivienda.
También el botín puede ser una bicicleta o un ciclomotor dejado sin la cadena de seguridad porque entramos a realizar el trámite en “un minuto”. En este caso los delincuentes son fáciles de detectar se trasladan en pareja en bicicleta o en un ciclomotor y cuando detectan un vehículo dispuesto en la forma descripta, uno de los cacos se “tira” y se lleva lo que tanto costó comprarlo.
Lo lamentable es que existe una falla en el sistema de seguridad (los delincuentes estudian cada movimiento de los policías). En este caso los ladrones o descuidistas primero determinarían que es preferible el delito en horas de la mañana. En este sentido, si observamos con detenimiento, es la hora que menos patrullaje tiene la ciudad. La mayoría de los vehículos policiales ( tres o cuatro) están estacionados frente a la comisaría.
Las estadísticas no deberían mentir. Estaríamos seguros que la mayoría del robo de ciclomotores, bicicletas o los actos de ladrones descuidistas se produce entre las 8 hs y 17 hs.
Estudio
Los malvivientes realizan un trabajo de inteligencia que incluye el estudio de los movimientos de la víctima y los policías. Los cacos es difícil que se equivoquen, están comunicados con celulares y un individuo en plaza San Martín vigilante podría indicar la salida o entrada de los móviles.
Los mismos son dejados estacionados frente a la Comisaría y se puede determinar con exactitud cuantos existen patrullando. El instante óptimo es cuando hay cuatro patrulleros inactivos y el propietario del comercio va en busca de algún elemento al depósito o el ama de casa atiende el teléfono ( puede ser el cómplice que llame)
Los cacos saben que un robo calificado (asalto) debe realizarlo al final del día por el aumento de la recaudación de dinero y el amparo de la noche. En este horario existe más patrullaje y es mucho más riesgoso realizar un asalto, por la penalización que podría tener y los riesgos que bloqueen la vía de escape con el arma de fuego y el botín.
Para desalentar esta modalidad creciente en hora de la mañana se debe tener un mayor patrullaje y un menor número de puestos fijos ( banco etc).
Por otro lado quienes andan en la calle se da cuenta que existe un determinado número de personas con frondosos antecedentes que merodean constantemente el centro, caminando, en bicicleta o ciclomotor.
Para evitar que la modalidad descuidista siga creciendo con el hurto de bicicletas, motos, carteras de damas, en los comercios, la policía debe utilizar una herramienta legal y muy “molesta” para ladrón: la detención preventiva y pedido de documentación del vehículo que utilizan ( bicicletas o ciclomotores).
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