Hace un mes un bebé de apenas minutos de vida fue arrojado por su madre al pozo de una letrina en una precaria vivienda de Villa Cañas el caso sigue conmoviendo.
El niño que por su llanto fue hallado luego de una ardua tarea donde intervinieron los Bomberos Voluntarios que debieron abrir el pozo de la letrina cubierto de piedras y ladrillos y luego ingresar al mismo para rescatarlo.
El juez de Menores Javier Prado lo tiene bajo su guarda y analiza la posibilidad de entregarlos a una familia sustituta.
La situación judicial de la madre está siendo analizada por la Justicia de Venado Tuerto debido a que intento matar a su propio hijo.
El bebé fue arrojado en el pozo ciego de la letrina de una casa de calle 38, sin número, cerca de las 14 hs del martes 19 de julio último.
La inmediata presencia de Bomberos Voluntarios y del servicio de ambulancia permitieron que el pequeño recién nacido pudiera ser rescatado con vida de una profundidad aproximada de dos metros.
Para ello fue necesario retirar las lajas y chapas que recubrían el pozo de la letrina tras recibir las primeras atenciones médicas fue trasladado al hospital de Villa Cañas y luego al Instituto de Neonatología de Venado Tuerto.
Una vez restablecido volvió al nosocomio y aguarda la definición del juez para convivir con una familia provisoria o de parentesco sanguíneo.
La madre biológica, tras el parto espera la definición del juez.
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