De inmediato, efectivos de la fuerza arribaron al lugar y hallaron un tubo conectado a un reloj que estaba en una caja de zapatos y que al parecer, «estaba en condiciones de estallar» si alguien lo manipulaba.
Alrededor de las 18:30 hs del jueves, una mujer -cuyo nombre no dio a conocer- realizó un llamado telefónico a la Policía nicoleña y advirtió la presencia del extraño artefacto.
En consecuencia, los bomberos y sus peritos expertos en explosivos partieron hacia el lugar, y se encontraron con que en el piso cerca de uno de los rincones había un caño con doble rosca de cuyo interior asomaba un reloj como parte de una estructura colocada en el interior de una caja de calzado.
Fuentes policiales informaron que «no sólo comprobaron que era una bomba sino que se trataba de una de considerable poder y en condiciones de estallar en cuanto alguien la manipulara».
El hecho causó tal conmoción que convergieron en ese domicilio, efectivos policiales de las tres comisarías, además de Infantería, Policía Federal y Departamental de Investigaciones.
Se interrumpió el tránsito vehicular y de personas en un amplio sector que fue determinado por los policías a través de la colocación de cintas.
Los expertos en explosivos del cuerpo de Bomberos solicitaron que no hubiera gente a menos de cien metros en línea directa y tras cortar el gas que alimentaba a un calefactor que funcionaba pared de por medio con la Municipalidad, hicieron detonar el explosivo.
Los edificios cercanos a esa esquina se sacudieron con el estallido y una de las es- quirlas destruyó el vidrio del cajero y terminó estrellándose contra una chapa ubicada en la obra de ampliación de la Asistencia Pública ubicada en frente del palacio municipal.
Finalmente, tras la explosión provocada se observó que los daños fueron muchos en el cajero y que, entre otras cosas, había volado «la puerta que dividía el pequeño salón utilizado por los clientes del sistema y el espacio a partir del cual se mueven los empleados bancarios que reponen efectivo y controlan el funcionamiento del cerebro electrónico», relataron los peritos
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