El juego, que fue arbitrado por Ricardo Colabella y Silvio León, comenzó siendo favorable a los colonenses con el buen trabajo de Luciano Baratti, Jesús Belza y Emanuel Ochoa; los entrenados por Marcelo Moretto hasta ese momento desarrollaron un partido importante pero el celeste ajustó la defensa zonal y la visita se quedó sin gol. Lentamente Manuel y Juan Martín Fontana cerraron todos los caminos que utilizaba Alianza para arribar al cesto y a la hora de atacar convertían con comodidad con el aporte de Joaquín Zeperizza.
Con una ventaja de 5 puntos (25 a 20), el local salió a disputar el segundo período y a partir de este cuarto, aunque parezca mentira, Alianza nunca más pudo controlar al equipo de Carlos Courtial que aprovechó al máximo los constantes errores de los colonenses que perdieron demasiadas pelotas en ataque sin tener un basquetbol para nada ordenado. Los hermanos Fontana, Bernardo Remy o cualquiera que se lo propusiera en Juventud llegaba al gol porque los de Moretto no defendía a nadie.
El tercero de los cuartos fue similar a lo que se venía dando, el celestes era dominador de un partido donde el rival pasaba inadvertido por la cancha; Manuel Fontana atrapaba todos los rebotes en los dos cristales y su hermano Juan Martín los convertía en el cesto de enfrente.
Zeperizza también penetraba con facilidad en la defensa de los colonenses que no encontraban el rumbo porque sus basquetbolistas parecían estar en otro partido.
Los últimos diez minutos sirvieron para completar la contundente y clara victoria de Juventud ante un Alianza que deberá cambiar muchísimo para el segundo partido de cuartos de final; caso contrario, el celeste será el que conseguirá el pasaporte a las semifinal.
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