En el 2002, se reclamó que las autoridades municipales realizarán el mapa de esta cruel enfermedad, para determinar fehacientemente los factores que podrían incidir sobre la enfermedad y descartar otros.
En esa oportunidad estábamos hablando de PCB, arsénico en el agua, plantas de silos, formulas para hacer riego asfáltico, pesticidas, altos porcentajes de nitrato en agua, etc.
Sin embargo el tiempo pasó, sabemos que se esta realizando una estadística pero el mapa sigue ausente. Los problemas concretos de la gente parecen que no importan si se debe “pensar” o trabajar en “demasía”. Las últimas noticias señalan que de los cuatro puntos cardinales ciudades ubicadas en nuestra región, comenzaron a preocuparse por este creciente fenómeno.
También, vale acotar que en Colón si buscáramos en un mapa nos daríamos cuenta que existirían barrios con mayor incidencia de cáncer (Centro de la ciudad y Barracas) y otros con menor (por ejemplo barrio Mirador del Lago).
San Pedro
En San Pedro el Concejo De- liberante peticionó para que las autoridades competentes inicien alguna investigación sobre los crecientes casos de Cáncer que se detectaron en esa ciudad.
La petición toma más fuerza porque incluso familias que cuentan con algún miembro afectado por esta enfermedad, están dispuestas a colaborar con las autoridades en todo lo necesario para se analice seriamente si existen peligros evitables para la población.
El objetivo general es el mismo: saber, conocer, informarse con datos confiables sobre la posibilidad de que el avance de la enfermedad esté relacionado con factores externos.
Desde posibles contaminaciones en el agua, hasta la existencia de PCB en transformadores eléctricos o radioactividad proveniente de la central nuclear de Atucha, pero también otros agentes como los químicos que se aplican en los campos.
Una de las zonas más afectadas por casos de cáncer se ubica en pleno centro de la ciudad, tal como lo menciona el proyecto de resolución del concejal Benito Larraburo. En un radio de apenas una cuadra, al menos se registraron diez casos que alarmaron a los vecinos.
En la Argentina, como en otros puntos del planeta, una de las organizaciones que cuenta con mayor conocimiento sobre la contaminación ambiental y sus posibles consecuencias para la salud de la población es Greenpeace.
Este organismo, por ejemplo, interviene en una causa judicial abierta en el partido de Ezeiza a raíz de varias denuncias públicas efectuadas por vecinos por la proliferación de casos de cáncer, que derivó en un peritaje sobre el agua por contaminación con uranio.
En este caso, la mirada apuntó al Centro Atómico de Ezeiza porque el 74 por ciento de los pozos de agua analizados en lugares cercanos a éste, estaban contaminados con uranio y nitratos, elementos radiactivos que pueden provocar, entre otras enfermedades, distintos tipos de cáncer.
Junin
Un grupo de vecinos del barrio Fortín Tiburcio de la ciudad de Junín manifestaron su preocupación ante la aparición de entre 25 y 30 casos de personas enfermas de cáncer en la zona. Creen que la causa podría ser las antenas de telefonía celular que se encuentran instaladas en un radio de tres a cuatro cuadras, lo que derivó en una investigación para analizar el impacto que pueden tener las radiaciones de estas torres en la salud.
Por su parte, el abogado Pedro García De Palma inició una investigación al respecto y adelantó que se reunirá con concejales del bloque de la Unión Cívica Radical. El letrado indicó que ya hubo un encuentro previo, «donde se me informó que hay en estudio un proyecto de ordenanza destinado a regular el tema de la instalación de las antenas en sectores urbanos».
De Palma inició un estudio luego que se conociera que en un barrio donde está instalada una de estas torres, en un radio de tres a cuatro cuadras, se detectaron entre 25 y 30 casos de personas que padecen cáncer, por lo que está interesado en determinar si el funcionamiento de antena de comunicación podría influir negativamente sobre las personas con la radiación que genera ya que «es llamativo número de fallecimientos por cáncer»
Villa Constitución
En Villa Constitución, los vecinos de un barrio que tienen una alta incidencia de cáncer, sospechan que el agua esta contaminada con arsénico, y además entre otras cosas le echaron la culpa a componentes del riego asfáltico.
En San Eduardo ( tal como lo publicáramos la edición pasada) una pequeña localidad ubicada a 25 kilómetros de Venado Tuerto existe Incertidumbre .
En los últimos treinta días fallecieron cuatro jóvenes que padecían cáncer, cifra que se suma a los más de setenta que perdieron la vida desde el 2000 como consecuencia de esa enfermedad. La cifra es elevada y supera la media provincial.
Las autoridades sanitarias locales relevarán a las casi mil personas que viven en San Eduardo a los fines de detectar tan extraño fenómeno. Se desconocen los motivos o qué genera esa situación pero sus habitantes tienen una certeza, algo está pasando en el pueblo y no es nada bueno.
San Eduardo es una pequeña comunidad de alrededor de 1.200 habitantes, sin embargo son 900 personas las que viven en el pueblo. El resto pertenece a la zona rural, aunque unos doscientos están empadronados en la localidad pero residen en otro lugar, básicamente en Venado Tuerto.
Las sospechas de tan alta tasa de cáncer recaen sobre los transformadores con PCB, los fumigadores que pasan por el pueblo, las cerealeras o el agua que se consume. También se sabe que debido al arsénico en agua es alto el número de casos de cáncer en Venado Tuerto, y la zona de Hughes Wheelwright etc.
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