Lo notable es que por el crimen del juninense, otro hombre con idéntico apellido y de similares características físicas habría sido encarcelado dos años y ahora liberado tras un juicio oral y público.
Como se recordará Lucio Díaz, estuvo detenido en la Comisaría de Colón, lugar donde escapó, para luego ser detenido en cercanías de Salto, acorralado por la policía y la enfermedad terminal que sufre: SIDA.
La historia indica que a Héctor Esteban Saracino lo habían asesinado de un balazo en el pecho mientras se encontraban en su farmacia. Poco después José Luis Díaz fue detenido como principal sospechoso. Sin embargo, en medio de la adrenalina judicial y policial apareció una versión extraoficial que desvinculaba Díaz del caso y en cambio relacionaba con el crimen a un sujeto de similares características físicas y, curiosamente, el mismo apellido.
Los pesquisas evaluaron la hipótesis, nunca confirmada, pero ante el reconocimiento del único acusado por una testigo clave y otras evidencias, esa pista quedó en un segundo plano y finalmente fue descartada. Díaz fue recluido en la Unidad Penitenciaria N° 13 durante casi dos años, hasta que en el juicio oral al que lo sometieron, los jueces determinaron su inocencia y ordenaron que fuera liberado. El homicidio del farmacéutico quedó sin culpables. Pero ahora, aquella versión secundaria del caso es evaluada por funcionarios policiales y judiciales, quienes no descartaron retomar la pesquisa siguiendo esa línea de investigación.
Parecido físico
Las autoridades judiciales confirmaron que ese sujeto tiene un llamativo parecido con José Luis Díaz, de unos 30 años y mantiene vinculaciones con delincuentes de Junín. Se trataría de Lucio Díaz.
El mismo año que mataron a Saracino también habían asesinado de un tiro en el pecho a un carnicero, identificado como Miguel Roces, en la ciudad de Pergamino. Uno de los acusados fue Lucio Díaz .
El sujeto, junto a un cómplice, permaneció prófugo durante varias semanas, pero la Policía logró detenerlos en Salto. Pocos meses después, fueron trasladados a la comisaría de Colón, de donde se fugaron limando los barrotes de la celda que ocupaban junto a Juan Carlos Mora y Jacinto Esteban Cabrera..
Tras varios meses de búsqueda, Díaz fue recapturado y trasladado a una cárcel de La Plata.
Eventual vinculación
La posible vinculación de ese delincuente con el asesinato del farmacéutico de Junín, ocurrido el 28 de mayo de 2003, reapareció en los últimos días. Primero fue en la Unidad Penitenciaria N° 13 y luego en ámbitos judiciales y policiales.
Una de las fuentes, vinculada a la instrucción por el homicidio de Saracino, no descartó retomar la pesquisa en base a esa línea investigativa.
En ese sentido, comentaron además que actualmente “el imputado está alojado en una unidad carcelaria de La Plata”, a la que habría sido trasladado luego de comprobarse que es HIV positivo y que su estado de salud había empeorado.
Es un ladrón que “siempre actúa armado” y en otros hechos que cometió, como el homicidio del carnicero de Pergamino, “no dudó en disparar”, explicó.
La zona
Lucio Díaz fue capturado en el 2003 en Salto, también tendría robo calificado en Ascensión, pareje “La Angelita” y otro en la calle Mitre de Ascensión donde asaltaron a una pareja de ancianos y otros hechos de piratería del asfalto en la zona de Salto.
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