Los imponderables del clima, pero también el mal estado de los caminos rurales por falta de mantenimiento y nula inversión, atentan muchas veces contra la salida de la cosecha o la salida de la leche de los tambos. En suma, hay un conjunto de factores que conspiran contra las actividades agropecuarias en el principal estado provincial del país.
Precisamente para facilitar el traslado de la producción en forma segura y rápida hacia los centros de distribución y consumo, el gobierno bonaerense tiene en carpeta un plan para construir caminos rurales municipales de hormigón, que será financiado en gran medida, por fondos provenientes de las Administradoras de Fondos de Jubilaciones (AFJP).
Este programa fue analizado por el gobernador Felipe Solá y su ministro de Asuntos Agrarios, Raúl Rivara, en la última reunión de Gabinete. Ahora resta concertar un encuentro con el ministro Roberto Lavagna, para que el titular de la cartera de Hacienda autorice el mecanismo financiero con el que se regirá el repago de la deuda.
La idea es pavimentar caminos rurales municipales, con un ancho de 3,5 metros, en hormigón, un material que requiere por todo mantenimiento, cada diez años, y en forma alternada, sellar las juntas con silicona. Así, estos caminos se constituirán en el paso de camiones para la salida de la producción, el normal abastecimiento de insumos y la circulación de maquinaria agrícola.
El plan será financiado a través de un fideicomiso con aportes, en su mayoría, de las AFJP. La deuda contraída es a diez años. La garantía primaria es la coparticipación municipal, así el intendente que adhiere pone la coparticipación como garantía a disponibilidad del fideicomiso.
La segunda garantía es mediante un sistema de contribución por mejora del que participan todos los productores que están a favor de la obra, quienes a su vez, son favorecidos por una excención impositiva del municipio (Inmobiliario Rural y Tasas).
El plan que Rivara busca presentarle a Lavagna -ya hubo reuniones preliminares con funcionarios de Hacienda-, tiene tres grupos constituidos de municipios con proyectos terminados. Así el grupo que conforman Azul y Olavarría está con el proyecto terminado, listo para licitar la obra; el que componen Chivilcoy, Alberti y Bragado tiene licitado el proyecto, y resta adjudicarlo; mientras que se constituyó un tercer grupo, con Rojas a la cabeza.
No obstante, el propio Rivara concede que la iniciativa tiene su grado de dificultad: "Yo no quiero embalar a ningún intendente en esto porque la verdad es que también es cierto que después hay una deuda por diez años". Por eso, en la Provincia buscan la autorización para definir una "moneda campo", esto es, en función del calor de la carne y los granos.
"La vuelta se la tenemos que encontrar, no es usual que el privado ponga plata para una obra que va a estar a disposición de la comunidad", explicó Rivara.
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