21 DE MARZO DE 2005
Una de las medidas, en conjunto con el Movimiento Rural Confederado, es una campaña de recolección de firmas para acompañar la presentación de un proyecto de ley para la eliminación de las retenciones, iniciado las zonas rurales para continuar en las grandes ciudades para concienciar a la opinión pública del perjuicio de las retenciones y hasta conseguir las firmas necesarias para acompañar el proyecto de ley.
Consideramos que este impuesto es distorsivo y confiscatorio y que genera una concentración de riqueza en las áreas urbanas por lo que no debemos cejar en nuestra lucha para lograr una definitiva eliminación si pretendemos un país verdaderamente federal con un equitativo desarrollo regional.
Argentina es el único país del mundo que aplica tremenda carga a su producción agropecuaria. Nuestro vecino Brasil, que durante décadas fue importante comprador de maíz Argentino, hoy no solo se autoabastece sino que compite con nuestra producción en el mercado internacional.
Esto lo ha logrado con una fuerte política agropecuaria que incluye el objetivo del autoabastecimiento. Durante el año 2004 el Gobierno del Brasil destino 15.000 millones de dólares al sector en los diferentes planes que contiene, la respuesta del sector productivo es notoria. Nuestras exportaciones de trigo a Brasil tienen un horizonte limitado.
No podemos seguir destinando más del 50 % de nuestros ingresos a pagar la carga tributaria impuesta por el estado. Pensar que el nuestro es el único país del mundo que puede funcionar sin su principal fuente de riqueza es indudablemente una utopía, pero este es el camino que estamos transitando. ¿Hasta cuando podrá seguir siendo eficiente nuestro sector agroindustrial en este contexto? En cuatro años en retenciones solamente el agro ha pagado un total de casi 9.000 millones de dólares a las voraces e ineficientes arcas del estado.
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