"Voy a buscar tu corazón a Pergamino y vuelvo", escuchó Miguel, con los últimos soplos de vida que le quedaban. Tras sufrir un infarto, llevaba ocho meses en la lista de espera nacional para trasplantes de órganos. Entonces, las palabras de su médico le sonaron como música. Horas después, la operación salió bien y se hizo realidad otro milagro de la ciencia y la solidaridad humana.
Eso sucedió en 1996, pero no quedó perdido en la historia. Además de permanecer grabado a fuego en el alma de los protagonistas, quedó registrado en el archivo de nuestro diario LA OPINION. Y esa fue la punta del ovillo para que Miguel, varios años después, pudiera encontrar a la familia de Patricio y le agradeciera la actitud de generosidad que tuvo cuando él tanto lo necesitaba.
Esa vivencia de encuentro, de emoción y de profundo agradecimiento será el eje, esta noche a las 21:00, del programa "Cadena de Favores" que se emite por Canal 13, con la conducción de Verónica Lozano. El ciclo, que empezó el domingo pasado, se compone de relatos con todo el suspenso que la televisión puede lucir. Pero, además, con un par de vueltas de tuerca especiales. Primeramente, el protagonista de cada caso intenta localizar a la persona que lo ayudó sin pedir nada a cambio, para agradecerle su generosidad. Y luego, en retribución, el que fuera aquella vez el beneficiario se comprometerá a hacer un favor a otro u otros que lo necesiten. Así se va armando la cadena de favores.
El caso real de Miguel Moral, un cordobés que ahora tiene 56 años, empezó prácticamente cuando subió la escalera mecánica del Complejo LA OPINION Plaza, un día que andaba cerca. Un par de notas escritas en lejanos 8 y 9 de junio y un aviso fúnebre le dieron las primeras pistas para acercarse con cautela y respeto a la familia de su joven donante y empezar su gesto de agradecimiento. Primero escribió una carta diciendo "el corazón de tu hermano está vivo" y luego pudo llegar hasta el padre de Patricio, a quien consideraba el máximo responsable de aquella crucial decisión que para él abrió las puertas de un "nuevo nacimiento" . Don José estaba en Chile, pero eso no fue obstáculo para que empezara una relación que aún es muy especial entre las dos familias.
- El programa y la emoción de su conductora: En este segundo capítulo que saldrá al aire hoy a las 21:00, estará como invitado especial el periodista Víctor Sueiro. Hasta ahora hay trece emisiones previstas y en cada una de ellas la conductora Verónica Lozano estará acompañada por un famoso. En la primera emisión fue Mario Pergolini. Y en los próximos lo harán China Zorrilla, Mariano Martínez, Fabián Gianola, María Laura Santillán, entre otros.
En cada emisión se sucederán una o más historias; de chicos de la calle, de un no vidente que le agradece a una maestra después de décadas, o la de Rosita, una tehuelche que se compromete a ayudar a una biblioteca que tiene que ver con su historia. También habrá tiempo para segmentos especiales, como "La Lupa", que destacará tareas cotidianas de gente anónima en beneficio de un tercero, que aún siendo pequeñas no dejan de brindar una ayuda enorme.
La conductora advierte que el programa no tiene "un tinte estrictamente solidario. Más bien se trata de que la gente tenga ganas de contar historias de agradecimiento, las comparta y que la cadena se amplíe en ese sentido. A la solidaridad a veces la entendemos como una colaboración casi obligada, medio culposa. Prefiero poner el acento en un gesto, en algo simple que te rescató y te dio ganas de seguir viviendo".
No duda, la ex compañera de Horacio Cabak, que es un buen momento para el lanzamiento: "Surgen un montón de programas que tienen que ver con otras cosas y me parece que 'Cadena' está bueno como para que el domingo a las nueve de la noche uno pueda parar y decir, 'me puedo emocionar, puedo conectarme con los sentimientos, puedo mirar a alguien a los ojos. Esto puede despertar las ganas de reencontrarme con alguien, de buscar a alguien'".
En la presentación de esta propuesta no estuvo ausente la vocación de tocar fibras íntimas de los televidentes. Se habló de que ésta es una posibilidad de sentir lo gratificante de ayudar a quien lo necesita, de "reconocer y agradecer al que ayudó, de rescatar lo positivo de situaciones negativas, de despertar conciencia, revitalizar valores, manifiestos o latentes".
Lozano acentúa la búsqueda de emoción: "Ojalá que a partir de la salida al aire del programa mucha gente quiera compartir sus historias y las podamos contar y seguir la cadena de favores. Eso sería lo más maravilloso que nos podría pasar".
Muy convencida de su humilde aporte, Lozano declaró ante LA OPINION que "la ayuda que propone la producción siempre se traducirá en tareas que tengan que ver con los más chicos. Los chicos tienen que ver con el futuro, por eso la apertura del programa conecta un momento de 1958 con el año 2037, dando a entender que la historia y las vidas personales no son otra cosa que una gran cadena de favores".
- Un nuevo eslabón a favor del Jardín Nº 921: La continuidad de la cadena de favores beneficiará en esta ocasión al Jardín de Infantes Nº 921 de nuestra ciudad. Allí comen todos los días 80 chicos pero tienen que esperar 40 minutos para que les llegue la comida porque ahí no hay lugar para cocinarla o al menos conservarla. Entonces, como Miguel Moral es maestro mayor de obras, la producción del programa capitalino promovió que el receptor del corazón siga la cadena de favores haciendo una ampliación del establecimiento educativo. Esta parte de la historia se verá en principio el domingo 23.
No hay que apurarse. Las tramas de Cadena de Favores y la paciencia de sus protagonistas lo están demostrando. Siempre hay una nueva oportunidad para sentirse complacido y en paz por hacer el bien sin mirar a quién. Para los beneficiados, este programa significó la oportunidad de aportar un eslabón propio de solidaridad. En muchos casos no supieron cómo hacer llegar el agradecimiento ni cómo seguir la cadena de favores.
Lo interesante es que sea la siempre criticada pantalla chica la que viene a dar esta posibilidad. Lozano se entusiasma y resalta que, al menos en este caso, "la tele es un medio para eso. Es disparadora de algo que una persona por sí misma no pudo hacer. Después se le dice, "para vos fue importante, ahora dales una alegría a un grupo de chicos que la necesitan"
Por lo novedosa, a la propuesta cuesta encuadrarla en un género determinado pero se la puede explicar fácilmente: es un programa donde la gente agradece, rescata historias positivas y a la vez se compromete con otras personas. Y está bueno que así sea. Porque, ¿qué sería uno sin esa ayuda, ese gesto quizás pequeño, pero que fue clave en algún momento de la vida, que llegó cuando todo parecía perdido?.
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