Era el lugar y el momento justo. Sin embargo, su aventura delictiva lo puso tras las rejas junto a otro sujeto. Y el causante de ese final fue un perro.
El curioso episodio ocurrió en Junin en el interior de una casa ubicada en la calle Hipólito Yrigoyen al 500.Un hombre saltó varios tapiales hasta llegar a una vivienda: era el blanco elegido. Miró antes de ingresar y comprobó que una ventana que da al patio estaba abierta. Por allí entró y comenzó a recorrer los distintos ambientes en busca de elementos de valor.
Provocó un gran desorden y logró sustraer una cámara fotográfica, bijouteri y una agenda, entre otros elementos. Pero en el preciso momento que estaba por escapar, comenzó el principio de su fin. La dueña de casa ingresó inesperadamente y sorprendió infraganti al ladrón, quien se dio a la fuga por el mismo camino que había utilizado para ingresar.
En esas circunstancias, el perro de la mujer, cuya identidad no se informó, persiguió al delincuente y pudo alcanzarlo cuando estaba trepando un tapial para perderse entre los techos linderos. El animal atacó en una pierna al hombre y si bien no pudo detenerlo le arrancó una de las zapatillas que llevaba puesta.
A partir de ese momento, el calzado -marca Puma color rojo- se convirtió en el principal elemento para iniciar una investigación en busca del autor del hecho. Así fue como tras radicar la denuncia por el robo, policías del Comando de Patrullas y Bicipolicías lograron establecer que una persona con las características descriptas por la víctima había sido vista ingresando en una casa cercana a la de la mujer. Y además, pudieron determinar que sólo llevaba puesta una zapatilla.
Los efectivos solicitaron un allanamiento al fiscal de turno, Marcelo Tuñón, quien autorizó y presenció el procedimiento. En el interior de la propiedad allanada por los policías había dos sujetos a quienes les tomaron el número de calzado.
El talle 41 que ambos tienen coincidió con el de la zapatilla Puma arrancada por el perro, por lo que los dos fueron considerados como sospechosos del hecho. Sin embargo, la prueba más fehaciente fue el hallazgo de las pertenencias sustraídas a la mujer.
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