El ciudadano colonense quisiera que los dirigentes políticos (concejales, funcionarios, afiliados, adhe- rentes ideológicos) les importara realmente el destino de los marginados, los pobres, la educación, la cultura, la salud y que los grandes temas estratégicos se discutieran en un mesurado equilibrio pensando en el bien común.
Colón Doce desde el año 2000, que viene peleando en soledad para que se construya la antena trasmisora de televisión (en el 2001 se habían completado todos los trámites para su instalación ).
También ese año, solicitamos a nuestros gobernantes de turno que el Municipio de Colón, la Cooperativa Eléctrica y la empresa rosarina Televisión Litoral crearan una figura jurídica y se asociarán en un proyecto para que los que aquellos convecinos que no pudieran pagar una cuota de cable, accedieran gratuitamente a los tres canales. (Canal 3, 5 y 7) Los archivos escritos de las notas quedan a través del tiempo.
Aceleración
En las últimas semanas, el proceso de instalación de la trasmisora de televisión se aceleró y los concejales, funcionarios y la Cooperativa Eléctrica se “enredaron” en una discusión que parece que nunca terminará.
La Municipalidad, dice que Televisión Litoral S.A, renunciará al proyecto porque aumenta el dólar y tendremos posibilidad de perder la señal (Sic). Las paradojas son muy grandes. La Cooperativa Eléctrica argumenta que debe citar a una asamblea para ver que determinan sus socios (nosotros), para que decidan si pueden o no ser socios de la Municipalidad (otra vez nosotros mismos). En tanto el gerente de Televisión Litoral, Héctor Vila señaló a Colón Doce:
“Las novedades del proyecto, deberían surgir desde la Municipalidad.
Como Ud. seguramente recordará, la antena transmisora se iba a instalar en una torre que para tal fin iba a construir la Cooperativa.
Para acortar los tiempos de ejecución del proyecto, la Municipalidad de Colón decidió entregar un aporte de dinero a la Cooperativa. El 14 de julio estuve en Colón reunido con los integrantes del HCD y les aclaré algunas dudas que tenían por lo que ya existe acuerdo entre el Departamento Ejecutivo y el Honorable Concejo Deliberante para el aporte del dinero a la Cooperativa.
Sin embargo, para entregar este dinero a la Cooperativa, la Municipalidad requiere de una autorización del Tribunal de Cuentas.
En la municipalidad me dijeron que a mediados de la próxima semana (por esta) esperan tener una respuesta del Tribunal de Cuentas.
Luego, y si la respuesta es afirmativa, ambas partes (Municipalidad y Cooperativa) deberán ponerse de acuerdo en la forma y contraprestación por el aporte del dinero mencionado.
Una vez resuelto el tema de la torre, se podría avanzar con el proyecto”.
Sin ofender
A esta altura de las circunstancia nos preguntamos sin animo de ofender: ¿Qué está pasando?.
Esta pregunta se multiplica exponencialmente cuando los mismos dirigentes que dicen estar preocupados por los pobres, observan como la Universidad del noroeste se instala en General Arenales, Pergamino, Rojas, Arrecifes, Junin y inexplicablemente Colón queda “misteriosamente” fuera de la posibilidad de contar con la excelencia universitaria y además gratuita para quien quiera cursar.
Cabe destacar que la UNNOBA –entre otras cosas- mirándola desde un “capitalismo salvaje” (a ver si al ver dinero se le despierta el indio a nuestros dirigentes) permitiría el ahorro a muchas familias de una masa de dinero ( más de 100 chicos por año deben concurrir a universidades de Rosario, Capital Federal, Río Cuarto –entre otras) que sería invertido en nuestra ciudad.
Un chico cuesta ( no ponemos inversión para no herir susceptibilidades ideológicas ) para estudiar fuera de nuestra ciudad un mínimo 500 pesos mensuales (ver recuadro). También debemos contabilizar los puestos de trabajos de profesores que se pierden y podrían dar clases en cuantiosas materias o en el curso de ingreso.
Por otra parte, cuantas becas ahorraría al Municipio.
La pregunta es ¿La Universidad gratuita podría beneficiar a igual que la trasmisora de televisión a los que menos tienen?. Entonces nos preguntamos ¿Porqué no se pone la misma pasión en la discusión para traerla? ¿El estudio no es importante o solo queremos pan y circo.
El dinero quedaría en nuestra ciudad
Una estimación aproximada nos indica que por año aproximadamente cien estudiantes de nuestra ciudad “emigran” para seguir carreras universitarias a Rosario, Capital Federal, La Plata, Río Cuarto, Casilda –entre otras-.
El costo mensual promedio de cada estudiante a sus familiares es de 500 pesos. Realizando un cálculo muy simple podemos afirmar que la masa de dinero que saldría de nuestra ciudad anualmente alcanzaría los 600 mil pesos destinados a sustentar la vida del estudiante.
Cabe destacar que muchos de los chicos abandonan en el primer año, pero la masa de estudiantes podría llegar a los 250 chicos o más que estarían en otros estados de sus estudios.
El gasto o la inversión teniendo en cuenta que muchos jóvenes en los años superiores trabajan se duplicaría y podría llegar a 1.200 pesos.
Al tener carreras universitarias en nuestra ciudad, las familias podrían ahorrar parte de ese dinero e invertirlo en Colón (prendas de vestir, cuotas de autos, motos, alimentos, arreglos de vivienda, muebles etc).
La Universidad no solamente serviría a los que no pueden ir a estudiar por carecer de medios económicos si no también a las familias que hacen un gran sacrificio para darle una carrera universitaria a sus hijos.
El desarraigo
El otro problema que se ahorraría es que muchos chicos fracasan en sus estudios debido al de- sarraigo y cambio de hábitos que les impone la vida en las grandes ciudades.
El alumno que no se puede adaptar fracasa.
La Universidad en Colón permitiría además que se evite esta problemática del desarraigo y separación de los alumnos de sus familias que sirven como una barrera de contención.
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