El 1,3 por ciento de todos los productores de la Provincia de Buenos Aires explota el 53 por ciento de las tierras productivas del territorio bonaerense; el 98,7 por ciento restante son los pequeños y medianos productores que laborean menos de la mitad de las tierras agrícolas de la Provincia de Buenos Aires.
El dato surge del censo agropecuario 2002, donde también se explicita que desde 1988 y hasta el 2002 la proporción de tierra cultivada por sus dueños disminuyó 8 por ciento, mientras que la proporción alquilada aumentó un 33 por ciento.
Relacionado con estos datos, tomó estado parlamentario en la Legislatura bonaerense el proyecto de ley que impulsa la Federación Agraria Argentina para impedir el proceso de extranjerización de la tierra que, según las conclusiones del Congreso Nacional y Latinoamericano sobre uso y tenencia de la tierra, en la Argentina alcanza a 16 millones de hectáreas.
Eduardo Buzzi, de FAA aseguró que, por ejemplo en General Villegas, capitales de los Estados Unidos compraron 75.000 hectáreas. En Pehuajó todavía recuerdan la compra de cinco mil hectáreas por parte del magnate inmobiliario George Soros.
Sin embargo en la Provincia, el problema para los productores medianos y pequeños (de menos de 300 hectáreas) está dado por la competencia contra los denominados pooles de siembra.
Aseguran que hay dos tipos de pooles: los más inofensivos que maneja un ingeniero agrónomo del lugar reclutando pequeños inversionistas que le escapan al Banco; y los «buitres» que manejan las propias empresas semilleras en sociedad con entidades crediticias; allí, aseguran, «hay una competencia desleal, que maneja números que a ningún productor le cierra».
Incluso el aumento de los precios de alquiler de las tierras -que en pleno boom sojero fue del orden del 50 por ciento- empuja a los dueños de pequeñas extensiones a alquilar sus tierras y recibir una buena renta.
«Pero este proceso, como la extranjerización de la tierra, produce el despoblamiento del campo bonaerense», dijo el director de la Región Centro Oeste bonaerense de la FAA, Miguel Quarleri.
El dirigente gremial admitió que en los campos bonaerenses «no se da el fenómeno que sí se puede constatar en Catamarca con la venta de 160 mil hectáreas con 300 habitantes adentro, pero es importante que se instale el debate sobre la extranjerización», dijo Quarleri.
El proyecto de ley que presentó el diputado de la UCR, Luis Bruni, prevé la creación del Registro de Inmuebles Rurales de Titulares Extranjeros en el ámbito del Registro Provincial de la Propiedad Inmueble, donde se inscribirán todas las operaciones.
De este modo, se estipula que las áreas rurales pertenecientes a extranjeros comprendidos en esta ley, no podrán exceder de un 25 por ciento de la superficie rural total de los municipios donde estén situadas.
Los extranjeros titulares de tierras al momento de entrar en vigencia la ley en cuestión, tendrán 180 días para denunciarlo al registro creado.
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