En ese marco, la FEB llamó a un paro por 24 horas y el Suteba, a una concentración frente a la Dirección General de Cultura y Educación en la ciudad de La Plata.
Los principales sindicatos que nuclean a los educadores bonaerenses y que están agrupados en el llamado Frente Gremial Docente decidieron aceptar el aumento que les fue ofrecido a los trabajadores que representan, sin embargo adelantaron que no cesarían los reclamos.
Los sindicatos discutieron en sus respectivos congresos los pasos a seguir y la FEB convocó al paro que se prevé para el lunes, fecha establecida para la vuelta a las aulas de los alumnos bonaerenses.
El gremio reclama que incluyen la participación en la discusión del presupuesto educativo, la incorporación al básico de todas las sumas en negro, y la urgente resolución de trámites jubilatorios-.
La recomposición salarial programada por el Ejecutivo provincial -tras una negociación que se sostuvo durante más de un mes- alcanza a unos 240 mil docentes del sistema público y privado (unos 35 mil de escuelas con sueldos subsidiados por el Estado).
Contempla el aumento del sueldo básico para el cargo de maestro de grado, de 234 a 260 pesos, el blanqueo de un adicional de 20 pesos otorgado en febrero y la extensión de un adicional de 35 pesos a los docentes de la Educación de Adultos y los preceptores.
Además, se prometió normalizar el pago de la antigüedad (no se liquida en su totalidad ahora) y equiparar las asignaciones familiares a los niveles que paga la Nación.
Según se informó desde la Dirección General de Cultura y Educación, las modificaciones empezarán a regir a partir de este mes, de manera que el incremento salarial se cobrará desde agosto.
El Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop), comenzaría las clases sin un paro, aunque no se descarta que exista en las primeras semanas de agosto.
| 
