Con muchos antecedentes, luchas, idas y venidas, se considera que la Unión Cívica Radical, nace el 26 de julio de l891, cuando la corriente intransigente de la Unión Cívica, presidida por Leandro N. Alem, hiciera público un documento definido en el Comité Nacional, donde ya militaba el joven Hipólito Irigoyen. Alem e Irigoyen, tío y sobrino. Diez años es menor Irigoyen que su tío. Este siente una gran debilidad por el. El sobrino, por su parte, lo admira. Hipólito Irigoyen crecerá políticamente bajo la sombra hasta tomar vuelo propio. Terminarán enfrentados.
Alem intervino en las batallas de Pavón y Cepeda, en la guerra del Paraguay y muy joven, ya ahogado, alcanza prestigio como orador, poeta y legislador, pero sobre todo como hombre de una gran integridad moral y de un gran valor.
En abril de 1890, se realiza en el Frontón Buenos Aires un acto de proporciones inéditas. Entre otras cosas dice Alem..” La vida política de un pueblo es lo que marca su condición, su nivel moral y el temple de su carácter. La vida política no puede hacerse sino donde hay libertad y donde impere la Constitución....no puede haber buenas finanzas, donde no hay buena política. Buena política quiere decir respeto a los derechos, buena política quiere decir aplicación recta y correcta de las rentas públicas ; protección de las industrias útiles y no especulación aventurera para que ganen los parásitos del poder ...” y concluyó diciendo...” se necesitan grandes móviles, se necesita fe, honradez, nobles ideales, se necesita, en una palabra, ¡patriotismo!. Pero con patriotismo se puede salir con la frente altiva, con la estimación de los ciudadanos, con la conciencia pura, limpia y tranquila, pero también con los bolsillos livianos...” Todo Alem está en el discurso del Frontón.
Pasa el tiempo; Irigoyen crece políticamente en la provincia Buenos Aires, mientras que Alem, partícipe, todos estos años de muchas luchas, se siente abatido, físicamente débil y golpeado en lo espiritual por la muerte de su amigo Aristóbulo del Valle. En esas condiciones llega al 1º de julio de 1896 en que se suicida. Se llevó a la tumba sus amarguras pero seguramente se fue con la convicción de que su mensaje sería repetidamente escuchado por la gente.
En 1916 Hipólito Irigoyen es elegido por primera vez como Presidente de la Argentina. Es preciso señalar una cualidad que engloba toda la gestión, los errores y los aciertos; y que tiene la misma importancia que tuvo entonces, porque son situaciones semejantes. Se trata de la lucha por superar la degradación moral que había cundido sobre la sociedad, contaminándolo todo. Por lo tanto a nadie escapará lo necesario que era entonces como ahora y siempre, demostrar desde los más altos niveles de conducción del Estado, que se puede actuar con sencillez, con austeridad, sin altanería, ni ostentación, con honradez y transparencia.
Esta actitud de Irigoyen fue arquetipo, identifica desde entonces una característica que define al Radicalismo, más allá de las excepciones que también las hay. El simpe hecho de “ la vuelta a casa” una vez finalizada la gestión, pinta toda la concepción política de un alto contenido ético. Fallece el 3 de julio de l933.
La humilde casa de la calle Brasil 1039, desde donde salió y donde volvió Irigoyen cuando terminó su gobierno es, desde ese punto de vista, mucho más que un número de catastro. Es un dedo acusador que apunta a muchos, de los de antes y de los de ahora.
María Isabel Orive Secretaria.
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