19/07/2002

Jorge Rivas: “La justicia definirá su futuro”

La Cámara de Apelaciones de Rosario dictaminará en las próximas semanas la resolución con respecto a un pedido de unificación de condenas que presentó la defensa de Jorge Rivas .
La libertad puede estar muy cerca (antes de fin de año) o en el 2017. La Dra. Mercedes Guevara defensora del colonense Jorge Rivas apeló el fallo dictado en mayo por el magistrado Julio Kesuani.
En esa resolución Kesuani unificó dos condenas de 13 y 15 años. Rivas, de no prosperar la presentación realizada ante la Sala II de la Cámara Penal, quedaría en libertad recién en el año 2017. De lo contrario, con un fallo a favor, el colonense podría quedar en libertad en poco tiempo más.
La última sentencia está relacionada al célebre caso del empresario José Ricardo Díaz Franco, raptado en diciembre de 1988 en ciudad de Rosario, cuando circulaba con su automóvil por la esquina de las calles Urquiza y Rodriguez. Los raptores pidieron 300 mil dólares a los familiares del empresario lácteo. La entrega se debía realizar en un paraje denominado “Las Carolinas”. La policía cortó la entrega. Se supone que tras este hecho los delincuentes mataron a Díaz Franco.
La víctima jamas apareció, pero existen indicios muy fuertes que el rosarino fue ultimado en una vivienda ubicada detrás de la fabrica Lamopi, que pertenecía a un contador que en el presente no se domicilia en nuestra ciudad. El cuerpo fue luego trasladado en un vehículo para ser arrojado en un arroyo cercano a Pearson.

  • Rivas
    • La personalidad de Rivas se aleja de las descripciones de las crónicas policiales. Quienes lo conocen pueden advertir esta contradicción acentuada. Es un delincuente atípico. Su conversación es afable, posee una cultura general bastante sólida y su aspecto físico no delata su presunta ferocidad. Seguramente leerá esta nota y con una lapicera marcará errores de ortografía y de sintaxis si existiera.
    El conocido periodista policial Enrique Sdrech escribió, con información del comisario Julio Cavallo, que la banda integrada por Jorge Rivas desarrolló una gran actividad delictual en la década de los ochenta. Según sus investigaciones poseen 100 golpes de piratería del asfalto, 50 asaltos a bancos, 10 muertes por encargo y 6 secuestros extorsivos.
    El colonense siempre negó tamaña acusación. En un reportaje concedido al diario “La Capital” en junio de l999 dijo: “ A esta altura no creo poder decir otra cosa que no sea verdad. Soy pirata del asfalto. En su momento he vendido muchos autos truchos. Pero nada que ver con lo que me quieren achacar. Vender autos truchos y hacer secuestros extorsivos son dos cosas diametralmente opuestas”. También dijo que “ los secuestros fueron realizados por bandas de parapoliciales”.
    Por otro lado, el comisario rosarino Raúl Romero lo reconoce como uno de los que secuestro a dos empresarios cordobeses oriundos de Monte Maíz (Jorge Negretti y Fernando Masaro) y como el autor del rapto de Hugo Filepeti.

  • Felipetti
    • En la causa del santafesino Filipetti, el juez de Décima Nominación de los Tribunales de Rosario, Carlos Carbone, envía a Estados Unidos dos cassettes con voces para ser comparados. En uno de ellos un hombre pedía el rescate telefónicamente. La voz periciada fue la de Jorge Rivas.
    La comparación de voces realizada en la Universidad de Michigan y una pericia caligráfica fueron determinantes para la condena que recibió el colonense en l991 a 13 años de prisión.
    Aquel fallo de la Justicia se cumplió en mayo del 2002. La decisión del magistrado Julio Kesuani de unificar a la primera la sentencia por el rapto de Hugo Filipetti y el rapto y desaparición de José Díaz Franco (alcanzó a los 15 años), permitiría recién salir al colonense en el 2017. En la condena por el caso de Díaz Franco fue absuelto Ariel Garcia y el legendario delincuente pergaminense Andrés Roldan.
    La Dra. Mercedes Guevara apeló la decisión por considerarla ilegal. Los jueces de la Sala II de Apelaciones ahora deberán determinar si dan curso o no al pedido de la abogada defensora.

  • Las fechas
    • Jorge Rivas en la actualidad tiene 40 años y una vida delictual ajetreada. El 23 de mayo de l990 cuando contaba con 28 años fue detenido en Rosario por primera vez. En julio de l991 escapó de la comisaria de Colón, cuando estaba a cargo de la misma el comisario Leone. En el presente Leone se encuentra retirado y con domicilio en Pergamino.
    El 28 de julio de l992 fue recapturado en un operativo realizado por las fuerzas especiales de Santa Fe.
    El 13 de octubre de l995 queda en libertad por aplicación del famoso 2 por 1.
    Un año después cae en un operativo de rutina en cercanías de Casilda cuando manejaba un camión con mercadería ilegal desde la ciudad de Pergamino. El 16 de febrero queda en libertad con un permiso especial. Jorge Rivas se esfuma y el 17 de mayo es apresado por la policía de Colón, cuando se encontraba visitando a su segunda mujer en una vivienda de calle 43 entre 15 y 16.

  • La fuga
    • Uno de los hechos de su vida que conmocionó a la ciudad de Colón fue la “extraña” fuga protagonizada de los viejos calabozos de la Comisaría de Colón. Rivas estaba detenido en el calabozo principal. El cabo de guardia era Roberto Rodriguez. El Comisario Leone se encontraba en su despacho. Las versiones son diferentes. Aunque la que tiene más asidero dice que esa tarde un familiar de Jorge Rivas lo visitó, el cabo de guardia revisó las pertenencias que llevaba y constata que no tenía elementos de peligro. Acompaña a la mujer hasta el calabozo, abre la puerta del mismo y luego cierra. Cuando la mujer se retira, el comisario Leone pide que lleven a su despacho al ilustre detenido. Rodriguez saca a Rivas esposado y lo traslada a la oficina de su superior. El comisario le pide al cabo de guardia que le saque las esposas. Rodriguez y Leone quedan dialogando.
    Poco después la puerta se abre y Rodriguez observa que Rivas apunta con arma de fuego a la cabeza al comisario. Salen de la dependencia rumbo a calle 51 (frente del edificio).
    Rivas habría disparado contra Rodriguez que lo seguía. La bala impacta en la puerta principal.
    El cabo de guardia se apresta a disparar su nueve milímetros. La versión dice que Leone le pide no lo haga.
    Jorge Rivas suelta a su rehén y sube a un vehículo que lo estaba esperando. El cabo Rodriguez es sumariado y dos años después dado de baja de la policía bonaerense.
    El policía dice que se sumió en una gran depresión que finalmente le costó la muerte.Antes de su fallecimiento y en un largo reportaje dijo que no tenía nada que ver con la fuga de Jorge Rivas.
    El futuro de Rivas se definirá en un par de días, cuando la Justicia Rosarina decida si el colonense continúa o no cumpliendo condena en la cárcel de Coronda.




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