05/07/2002
|
Preocupación: El cuidado con los perros “asesinos”.
|
En Colón la problemática no está ausente. Por los menos dos criaturas fueron atacadas por perros con propietario. Un peligro que se debe evitar.
En los últimos meses en distintos puntos del país se vivieron momentos trágicos con perros “domésticos” que incluso atacaron a miembros de la familia propietaria.
El accionar de los canes costó la vida de dos niños. Todavía quedará en nuestra memoria el salvajismo de un Rottweiler en la ciudad de Escobar.
En Colón la problemática no está ausente y en las últimas semanas por los menos hubo dos ataques de estas características.
El ejemplo más emblemático, es el caso del perro de un conocido profesional y que ocurrió en pleno centro de la ciudad. Según trascendió un niño de corta edad estaba jugando con un can raza manto negro. El perro que había sido hasta el momento “muy manso” atacó al menor y lo mordió pero lo preocupante es que se ensañó y lo tomó por la cabeza. Una mujer (propietaria del perro) se dio cuenta y con trabajo logró apartarlo. El niño recibió serias heridas en la cabeza.
Otro caso ocurrió en un semillero ubicado entre Colón y Pergamino. El perro atacó e hirió a uno de los empleados. El can (cruza con manto negro) debió ser sacrificado y su cabeza enviada a analizar al Centro de Zoonosis de Avellaneda, donde los médicos diagnosticaron negativo el virus rabia.
Es cierto que en las últimas semanas fueron varios los hechos ocurridos en Colón y no precisamente con perros denominados callejeros. Los canes atacaron a sus propios dueños o miembros del entorno familiar. Las víctimas recibieron heridas de distinta consideración por lo general en pies y manos.
En el mismo sentido, hubo casos de perros raza Doberman o manto negro que debido a su marcada y creciente agresividad en una etapa de su crianza debieron ser sacrificados o ser trasladados a fincas ubicadas en zona rural.
Los cuidados
Los perros ancestralmente vivieron en manadas y en su “escala social” tenían un líder. Si una familia elige un perro para “guardián” debe tener en su “amo” suficiente carácter para educarlo y transformarse en su líder.
Por otro lado, la sociedad cambió, se fragmentó y en el presente las casas no tienen suficiente espacio (patios) para albergar a perros de raza grande con los inconvenientes que eso implica.
Un ejemplo es la raza Roitweiler, muy de moda en estos momentos. Es un perro excelente como guardián, pero debe ser educado con perseverancia desde muy chico para evitar trágicos inconvenientes, sobre todo con los más chicos que habitan la vivienda.
También debemos destacar que los canes al “despertar” sexualmente entre los 10 y 12 meses, se vuelven más irritables.
Otro caso es no comprar las razas de modas. En este sentido, en Colón existe gran cantidad de siberianos, que se crían en un hábitat contrario a su medio ambiente y con funciones que nada tienen que ver con las especificas de esta raza.
Un veterinario explicó que “luego de observar la conducta de muchas razas, particularmente tiene una escala para recomendar que comparta la vivienda con cualquier familia. En primer lugar está el Coli, luego el Boxer y en tercer lugar el manto negro”.
Las recomendaciones
Los veterinarios que fueron consultados recomendaron:
1- Asesorarse correctamente ante de comprar una mascota.
2- Según el espacio que se tenga elegir preferentemente raza chicas.
3- Al adquirir un can no fijarse las razas de modas, ya que muchas no corresponde al ambiente natural que se les puede brindar.
Por otro lado, un estudio realizado determinó que en la mayoría de las casas los perros “toman” el liderazgo del grupo y los hacen con actitudes muy marcadas. En este sentido, el liderazgo de un Pekingese es muy distinto en las consecuencias que traerá al núcleo familiar a las que pueda resultar la de un manto negro o un Doberman. El mayor problema en razas tan extremas en cuanto a la capacidad de hacer daño, es que el propietario no se sabe educar al perro.
Por último, la mayoría de los ataques que se producen en la calle se comprobaron que son de perros con dueños. El mejor método de evitar situaciones no queridas es salir con el perro con su bozal y correa. Nunca abrirle la puerta para que haga sus necesidades y dejarlo en libertad de acción en la calle. Las consecuencias pueden ser muy graves. El perro no razona, simplemente cuida su territorio.
|
|
|
