14/12/2001

Drogas en la región: "El camino de la muerte"

En San Nicolás se investigan pistas clandestinas de aterrizaje. La orden vino de la jefatura de La Plata ante una nota periodística del diario El Norte. Se realizó en Casilda un trabajo estadístico que causa temor. En Colón la pregunta es ¿Cuando combatiremos el flagelo?

salud.jpg - 14364 Bytes En abril del 2000 mediante una nota periodísticas alertamos de los posibles aterrizajes clandestinos de aviones en jurisdicción de Colón.
Los lugareños y una fuente confiable señalaban que en un sector de la zona rural realizaban avistamientos de aterrizajes en posibles pistas clandestinas que estarían ubicadas en el centro de un triángulo conformado por Colón, Pearson y Pergamino.
Los informantes señalaban que posiblemente las pistas se marcaran con luces y los aviones en horario nocturno y con vuelo rasantes descargaban misteriosos bultos. Estos paquetes eran recogidos por vehículos que estarían radicados en nuestra ciudad. En otras ocasiones cuando las condiciones de luz le per-mitian los aviones aterrizaban para dejar la carga. Averiguaciones nuestras determinaban que en esa zona no había pistas habilitadas por ningún organismo controlador.
En esa nota periodística señalábamos que lo relatado no era nuevo. En la década del 60 los cigarrillos de contrabando se depositaban a través de avionetas que volaban a baja altura en pistas clandestinas que estaban en la zona de Colonia Pellegrini.
También describimos que en el año 1964 se produjo un hecho fortuito que reveló parte de la trama secreta y el misterio de las luces sobre algunos campos. En el camino real que va desde Ruta 8 a estación Merceditas, un avión se declaró en emergencia y aterrizó.
El vehículo se estrelló contra un alambrado, los pilotos salieron ilesos huyendo del lugar. En el pequeño predio quedó una carga de cigarrillos importados que nadie reclamó.

  • En la región
  • Una nota realizada por el diario El Norte de San Nicolás cata-pultó un pedido de informes policial y una investigación sobre tráfico de drogas.
    Las expresiones de los vecinos residentes en la zona ribereña, activaron los sistemas preventivos y sobre todo los de represión del consumo y venta de drogas.
    Ya venía la gente de Investigaciones Complejas y Narco-criminalidad caminando una interesante pista, en la cual la parte ribereña tenía su gran importancia. Tras la nota realizada por el diario nicoleño desde Jefatura La Plata se pidió un informe al respecto y se ordenó incen-tivar controles en toda la ciudad.

  • El subcomisario Rodríguez
  • Al ser consultado el jefe de Investigaciones complejas de San Nicolás, subcomisario Ro-dríguez, respondió que «la gente no debe olvidarse que nosotros dimos un importante paso al frente con la operación Korea y también cuando logramos establecer que un sector importante de la zonas de Islas, era utilizado como pista sobre la cual alguien arrojaba drogas vía aérea y que otros se dedicaban a recoger el fatídico cargamento con lanchas o canoas».
    «Yo no puedo revelar aspectos de nuestra pesquisa -confió Rodríguez- porque sería perjudicar el seguimiento al llamado «pez gordo», esos, los traficantes grandes que tienen, para la gente, la triste fama de «caer pocas veces entre rejas».... »Estamos reforzando los equipos -agregaba Rodríguez- y ya tenemos para empezar a trabajar, al perro líder, buscador de alca-loides, que por las características de esta zona, seguro que nos va a resultar muy importante».

  • El perro
  • Word, el perro líder antidroga de Investigaciones Complejas de San Nicolás, es manso pero no claudica ante el olfato sorprendente que posee para saber que una persona porta alca-loides o que en un ámbito donde se realiza un cateo, hay marihuana, cocaína o éxtasis.
    Word se inquieta pero no produce crisis, sabe que buscar drogas es su misión, pero no lo altera ni excita el hallazgo, ya que fue entrenado sin necesidad de convertirlo en adicto.
    El can convertido en adicto, si se descontrola ante la droga hay que vigilarlo muy de cerca porque es capaz de agredir en busca de una «ración de alcaloide».

  • Procedimiento
  • La población de Colón azotada por las penurias económicas, la desocupación y el robo y roturas de vidrieras quiere a los “peces gordos” como dijo el comisario Rodriguez.
    Es hora de procedimientos y detención de los que trafican con la vida de los chicos: “Caiga quien caiga”.
    Sabemos en las últimas semanas por lo menos hubo un procedimiento fallido en un correo de estupefacientes hacia nuestra ciudad.
    Los detalles no serán publicados para no entorpecer una posible investigación.
    En San Nicolás existe una causa abierta que tiene colaterales que no fueron profundizadas debidamente. Solamente se proceso a una persona que actualmente esta detenido. Pero la detención podría ser la punta de iceberg mucho más profundo y que podría llevarnos a sorprendentes conclusiones.. La opinión pública pide urgentes resultados.

  • En Casilda
  • En la región el flagelo crece y para determinar parámetros que pueden estar en nuestra ciudad revelamos un estudio realizado en la ciudad santafesina de Casilda La encuesta sobre 1100 casos fue realizada por el Grupo de Prevención de la Drogadicción Almafuerte.
    Los consultados concurren a todos los colegios secundarios de aquella ciudad. El estudio reveló que se duplicó el nivel de consumo entre los adolescentes comparando un estudio similar realizado en l997. En aquella oportunidad solo el cinco por ciento reconocía alguna adic-ción. En el 2001 el diez por ciento de los estudiantes que cursan, primero, tercero y quinto año del nivel medio, que tienen entre 13 y 18 años admite ser adicto o haber consumido estupefacientes alguna vez.
    El dato es más alarmante cuando se sabe que una décima parte de los estudiantes habría ocultado su adicción debido a que contestó que no pediría ayuda en caso de consumir drogas.
    Los trabajadores de la Fundación Almafuerte considera que la venta de cocaína y marihuana supera en esa ciudad el millón de pesos al año. Los especialistas dicen que el nivel también es preocupante en Bigand, Chabas y Arequito.
    La encuesta reveló además que los jóvenes identifican fácilmente los lugares donde se comercializa la droga.

  • En Colón
  • Los índices en Casilda son preocupantes. La pregunta es ¿Cuánto nos separa de esa realidad?. En Colón las versiones en la calle dan nombres de los posibles lugares de venta.
    El primer precepto de los investigadores policiales para llegar a buen puerto es escuchar el rumor de la calle y luego tratar de comprobar si es cierto o no.
    Seguramente que en el noventa por ciento de los casos esos rumores o versiones serán ciertas y más tratándose de esta problemática.
    El presidente de la Fundación Almafuerte dijo una frase para tener en cuenta: “ Evidentemente existe una aceptación a la cultura de la droga que sumada a la disponibilidad de sustancias y la ignorancia de muchas familias por el tema, hace que los índices de consumo de droga sean cada vez más altos”.



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