12/10/2001
La seguridad en Colón: Hace falta más inversión
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La infraestructura de la Comisaría quedó retrasada en el tiempo. No hay casi lugar para detenidos. Hacen falta motos para patrullar y existe un alto porcentaje de minoridad en riesgo.
La información con que cuenta nuestro semanario de la Comisaría de Colón no sería segura para contener detenidos de mediana peligrosidad.
La época estival se acerca y seguramente los niveles de ilícitos aumentarán y nuevamente si no tomamos las previsiones del caso la situación nos va a desbordar y el malhumor en la población crecerá en forma proporcional.
La comisaría
Un tema central se encuentra en la infraestructura que cuenta la Comisaría de Colón. Los calabozos son reducidos, húmedos y con poca ventilación. El lugar es caluroso en época estival y frío en invierno. Por otro lado, existe superpoblación. En los últimos días (con los policías de Pergamino) se llegaba a una docena de detenidos.
Por otro lado, existe otro problema mayor al hacinamiento de los presos. A esta altura ningún funcionario podría negar que una fuga masiva puede ser posible. Colón Doce tiene información que señala que en una esquina de la celda mayor los barrotes de la reja estaban desoldados de la pared y los presos solo tenían que trepar por una pared bastante alta y luego levantar los hierros y escapar. Para mayor seguridad se había colocado una lona (similar a la de los camiones) que cubría el precario techo.
El perro
La investigación de un cronista policial determinó que en la terraza de la Comisaría se habría recurrido a un perro guardián raza “pichichus” que recorre la edificación y ante cualquier movimiento extraño ladra y avisa la posibilidad de una fuga. Las versiones son preocupantes y señalan que el can habría evitado con sus ladridos una posible fuga de presos. El tema no es menor debido a que en el interior de las celdas existen detenidos de mediana peligrosidad. Podemos argumentar que aunque se hubieran soldado las rejas del techo, la situación de la seguridad es endeble y se deben realizar nuevos calabozos.
La Comisaría de Colón fue fundada en l929 y desde entonces se “realizaron lavados de cara” en la infraestructura, pero nunca una reestructuración profunda de su edificación y adecuada a los nuevos tiempos que lamentablemente debemos vivir.
Ante esta situación es imperioso y urgente la construcción de calabozos por separado para delincuentes comunes, contraventores, menores y para mujeres que también cometen delitos en Colón.
Minoridad
Por otro lado, se debe trabajar arduamente en la comisión recientemente formada que se ocupará de la problemática de la Minoridad, tratando de ir a la raíz de los problemas y no solo con maquillajes que no dan solución verdadera ni duradera.
La gente y funcionarios entienden con ejemplos y Colón Doce busco dos. En el barrio Belgrano se domicilia una familia numerosa y que es altamente conflictiva. Algunos de los hermanos comenzaron con delitos menores a corta edad. Entre ellos hurto en comercios, “apoderamiento” de carteras ante el descuido de mujeres que concurrían a comercios y hurto de bicicletas.
El proceso de degradación familiar en los últimos años se agravó y en el presente un miembro de esta familia esta internado en un Instituto de La Plata por robos reiterados.
Un segundo hermano sería responsable de la violación reiterada de su propia hermana de tan solo ocho años.
La investigación de nuestro semanario determinó que existen suficientes testimonios y documentación probatoria de este grave hecho.
Un tercer hermano fue detenido hace pocos días por hurtos reiterados. El último de ellos una bicicleta en la zona del basural Municipal.
Televisión
La población de Colón se conmovió al enterarse que en el Club 9 de Julio había sido saqueado por una banda que se habría movilizado en una camioneta.
Los cacos se llevaron televisores, bebidas y parlantes de más de un metro de altura. La policía investigó y al realizar el allanamiento judicial en la casa de los sospechosos se encontró que toda la familia (incluso la jefa de familia) estaba observando un programa televisivo en el aparto de 25 pulgadas robado en la institución de calle 49 y 21.
Los ejemplos demuestran que la problemática es más profunda y debe ser tratada por un equipo de especialistas. La realidad nos señala que de no ser así, la inseguridad en nuestra ciudad seguirá en un espiral creciente y ya no podremos dominarla.
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