11/05/2001
Investigación especial: "Piratas del asfalto"
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En la década del 60 comenzaron con la nueva modalidad delictiva. Colón se convirtió en epicentro de la región. En el presente las principales cabeceras de esta actividad son Junín, Pergamino, Lincoln, San Nicolás y Saladillo.
A fines de la década del 60 el accionar de los delincuentes con grandes bandas se limitó. Las Cooperativas estaban casi tan fortificadas como los bancos, las grandes empresas comenzaban a pagar con cheques, los barrios exclusivos contrataban a policías privados, las joyerías más importantes se adherían a sistemas de control electrónico. Los asaltos se volvían cada vez más difíciles y había que buscar un talón de Aquiles en la cadena de comercialización. En esa época surgieron los "piratas del asfalto". Estos delincuentes se volvieron especialistas en detener camiones en las rutas y llevarse sus cargas con camión y todo.
Los rubros
Los rubros preferidos fueron, los artículos electrónicos, alimentos y ropa de vestir. Las bandas se extendieron en sus contactos para vender el producto del ilícito. El riesgo de las delaciones aumentó. El reducidor fue y es un personaje muy importante en la organización, pero no gozaba ni goza de gran confianza por parte del asaltante, la tradición esta repleta de historias de traiciones y entregas llevadas a cabo por los "reduces". Por otra parte, la modernización de los sistemas de controles, guardias privadas de custodias y diferentes complicaciones hizo que la modalidad por estos tiempos disminuyera, algunas bandas cambiaran de "palo" y se dedicaran al asalto de bancos.
Colón
En la región e incluso en el país la ciudad de Colón es conocida por la actividad de "piratas del asfalto". Tal vez el más recordado sea Jorge Rivas actualmente detenido en una cárcel santafecina. El propio Rivas acusado por el rapto y desaparición del empresario lácteo rosarino José Díaz Franco, en un reportaje señaló: " Pude ser pirata del asfalto pero nunca secuestrador". Un juez santafecino dijo que la banda capitaneada por el colonense, produjo en las rutas santafecinas y bonaerenses más de 60 ilícitos y una millonaria ganancia.
Actividad
La actividad de los "piratas" con origen en nuestra ciudad fue muy grande. En una época la inteligencia policial había detectado dos galpones en el propio ejido urbano. En estos "locales" con mucha velocidad actuaban los reducidores y la mercadería no permanecía estacionada más de dos días.
El último golpe policial contra este tipo de organizaciones en nuestra localidad aconteció hace seis años. La policía realizó un extenso trabajo de inteligencia que esta sintetizado en un casette de 80 minutos de duración, donde en "interferencias" telefónicas, se puede reconstruir todo el accionar delictivo y la ruta elegida para la reducción de mercadería. La organización llegaba a La Carlota, Carlos Paz y el propio San Miguel de Tucumán. El momento más tenebroso fue la intercesión de dos celulares en el mismo instante donde se realizaba el golpe a un camión que circulaba en la zona de Rojas.
La actualidad
Según una fuente policial, las bandas que operan en la actualidad tienen sus mayores contactos de "reducidores" en Junín, Pergamino, Lincoln, San Nicolás y Saladillo. En la mayoría de los casos los choferes de las grandes empresas son los "dateros" de los cacos. Por el "trabajo" pueden llegar a cobrar de 1000 a 2000 pesos. Los rubros más buscados son medicamentos, alimentos y herbicidas.
Los depósitos se ubican en cercanías de las rutas provinciales y nacionales. Los malvivientes prefieren galpones instalados en campos. La descarga es rápida y las unidades de transporte en la mayoría de los casos aparecen abandonadas.
La región
En el sur santafecino y sur de Córdoba aumenta por estás épocas la modalidad de robo de combustibles, algunas investigaciones avanzan y en la región puede haber muy pronto amplias repercusiones. Por otro lado, la indumentaria textil es muy buscada. Como ejemplo podemos decir que la firma Adidas en menos de un año sufrió 21 atracos de este tipo.
Los reducidores venden la mercadería a menor costo y además el comerciante se ahorra la cadena de pago de impuesto. En otros casos el seguro de la mercadería podría ser motivo de este tipo de modalidad. Los comercios que en muchos casos han comprado mercadería ilícita son almacenes, autoservicios y supermercados. En varias ocasiones el comerciante compra de buena fe. Los investigadores han encontrado mercadería ilícita de distinto tipo en Alem, Arribeños, Río Cuarto, Wheelwrigth, Vedia e incluso Colón.
La última
La última investigación exitosa que tuvo la policía bonaerense se originó en Junín. El caso todavía no fue a juicio oral y por este motivo estamos impedidos de dar mayores detalles. Un camión con 3500 cajas de vinos fue abordado por los "piratas del asfalto" en cercanías de Junín. La policía empezó una sigilosa investigación. El transporte se dirigió por la Ruta 65 a la localidad de Arribeños. En ese lugar descargó las cajas con la bebida alcohólica en dos depósitos construidos en cercanías de la ruta y cercano al centro urbano.
A los investigadores le llamó la atención la larga "mano" de los malvivientes. Aparentemente el "cabecilla" de la banda era un conocido delincuente apodado "El Chileno" y que tenía domicilio en la provincia de Mendoza. La inteligencia policial dice que en la actualidad las bandas se reciclan, intercambian información y mercadería. En el sur de la provincia de Córdoba, uno de los mayores centros operativos sería Río Cuarto y su actividad se extendería hasta nuestra zona.
Caso emblemático
Las delaciones señalamos están a la orden del día. En enero de l998 se produjo el famoso caso del robo de herbicidas en la empresa "Qeaca S.A" de Pergamino. La investigación se extendió por varias ciudades incluso Colón. El robo fue millonario y siempre quedo la sensación que no se llegó a la raíz de la banda.
La investigación comenzó por orden del Dr. Delfín Fernández. El origen habría sido una anónimo procedente de la ciudad de Rojas que tenía una larga lista de policías implicados en el tema. La denuncia no pudo ser comprobada. Los allanamientos se realizaron en cercanías del estadio de Douglas Haig, en el centro de Pergamino, un taller y en un domicilio del barrio Acevedo. Entre ellos se habría ingresado a domicilios de uniformados. También se secuestró un camión Mercedes Benz color blanco y que fue utilizado para trasladar la mercadería. El jefe de la Departamental, Oscar Laurentino Aranda negó la participación policial. Lo cierto es que hubo sumarios administrativos. Lo notable del caso es que una semana antes del ilícito, en la planta de "Qeaca S.A" se recibió un llamado anónimo alertando sobre la posibilidad de un hecho delictivo de estás características. Pero lo más insólito es que con aviso y todo los asaltantes realizaron el hecho solamente armados de cuchillo. El robo fue millonario y nunca fue debidamente aclarado.
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