29/12/2000      * Nota de archivo: 07/04/00 *

Historias de vida: Atilio Ortiz

Atilio Ortiz, tiene 77 años y todos los días recorre muchos kilómetros vendiendo plantas con un carro tirado a mano. Con el dinero que gana ayuda a su hijo y nietos.
Todos los días la mayoría de los colonenses, observan a un señor mayor llevando un pequeño carro por las calles de la ciudad intentando vender distintas clases de plantas. Colón Doce en este caso quiso conocer algo de la vida de este particular "personaje".
A primera hora de la mañana nos dirigimos a "Van Giu" donde podíamos ubicarlo. Al llegar, estaba Atilio Ortiz cargando en su carrito varias plantas como lo hace todas las jornadas. De inmediato se pone a disposición nuestra para comenzar la nota.

  • Recuerdos
    Atilio se emociona al recordar los comienzos de su vida diciendo que "tengo 77 años y desde joven he realizado distinto tipo de tareas como por ejemplo en el campo juntando el maíz a mano.
    Además trabajé en los tambos donde a partir de las dos de la mañana realizamos el ordeñe de las vacas a mano. Las inclemencias del tiempo no importaba, el trabajo se realizaba con heladas, lluvias y grandes tormentas, luego también pude tirar guinches.
    La vida vino con suerte y pude comenzar a trabajar en las estancias con las haciendas, esta tarea pude realizarla hasta hace poco tiempo"

  • Presente
    Ortiz contento dice que "me jubilé no hace mucho tiempo. Vine a Colón y comencé en este particular empleo que es vender plantas ornamentales por las calles".
    Al referirse como es su día Atilio explica : "trabajo de lunes a sábado mientras que el domingo descanso. Todos los días me levanto muy temprano y vengo a "Van Giu" donde cargo plantas en mi carro.
    No tengo horarios ya que este trabajo es así, a veces te demanda mucho tiempo mientras que otras veces se termina temprano" agrega que "realizo este trabajo para estar mejor.
    Imaginate que soy jubilado y en este país los viejos estamos olvidados, por lo que muchos de nosotros debemos trabajar. Además por desgracia hace poco tiempo falleció mi mujer por lo que quedé solo con un hijo que vive conmigo y algunos nietos, que cuando puedo los ayudo con el dinero que me deja la venta de plantas".

  • A gusto
    Cuando habla de su empleo se le dibuja una sonrisa en su rostro y dice que "estoy muy a gusto con lo que hago. Cualquier trabajo que hice, tanto en el campo como en la ciudad, me agradó. A Colón vine hace nueve años y desde entonces trabajé en alguna panadería, cortando y juntando malezas de los terrenos entre otras cosas".
    Atilio recorre la ciudad todos los días y dice que "camino muchas cuadras. Por ejemplo ahora me voy al Barrio Mirador del Lago, lo recorro todo y vengo acá de nuevo para cargar plantas. Gracias a Dios no me canso por lo que puedo caminar mucho más".
    Atilio se emociona y se muestra agradecido a toda la comunidad y afirma que "a mí me conocen todos y me quieren mucho. El ejemplo hay que darlo trabajando porque sino no pasa nada.
    Yo luché de chico y sigo luchando todos los días. En la vida me fue mal y bien pero siempre fui para adelante, nunca aflojé.
    Si te entregás es peor". Agrega "me gustaría que todos buscaran una idea para defenderse. Muchas veces les digo a los jóvenes que no se entreguen, sino mirá la edad que tengo y sigo andando".



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