05/05/2000
Asaltaron otro comercio

El ladrón, un individuo de 25 años, de contextura delgada y 1,75 de estatura, bién vestido con una campera gris y un gorro de lana, amenazó con arma de fuego al almacenero y le sustrajo trescientos pesos de la caja registradora y de una antecocina aledaña al local.

Luego y antes de retirarse disparó el revólver presumiblemente calibre 32.
El proyectil pasó cerca de la víctima rebotó en el piso y quedó adherido a la pared.
El solitario malviviente huyó por calle 25, retomó la calle 44, perdiéndose el rastro.

La policía, con ayuda de un efectivo fuera de servicio logró establecer la posibilidad de que el asaltante pudo tomar un remis en inmediaciones de calle 42 y dirigirse al barrio de las 150 viviendas.

El trabajador del volante responsable del viaje, interrogado por los uniformados locales, describió al pasajero como un hombre flaco, bien vestido y con un gorro con los colores de Boca Juniors.
El operativo, montado poco déspues no obtuvo los resultados esperados.

Por nuestra parte, podemos aportar otra hipótesis de trabajo.
Los últimos asaltos estarían llevados adelante por una banda de dos o tres personas que se movilizarían en un viejo vehículo.

Las víctimas de robos a mano armada (mercadito "Don Ignacio", verdulería de 49 y 22, estación de sevicio "El Sol") y los "scruche" de casa pueden estar conectado.

Los asaltantes harían la inteligencia, luego se turnarían en los asalto a mano armada, pareciendo que se tratara de un solo individuo.
Pero en cercanías del comercio lo estaría esperando el resto del grupo con el auto en cuestión para desaparecer rápidamente del lugar.

Esta hipótesis queda fortalecida, cuando un policía observó -contemporaneamente al asalto a Piovesan-, pasar por calle 25 hacia calle 45 un vehículo (reservamos marca y color para no entorpecer la investigación) recurrente en este tipo de ílicitos.



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